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viernes, 5 de febrero de 2010

Ruta II: Fuenteheridos-Los Marines




                              
 
 
El lugar elegido esta semana para hacer senderismo es el Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche (Huelva,) (para los que no lo hayan visitado, no creerán que están en Andalucía, como otros desacertados tópicos.)
El recorrido empezará en el pueblo de Fuenteheridos, donde dejaremos el coche aparcado en la plaza de El Coso (la visita a la localidad la dejaremos para la tarde.) Desde allí parte el recorrido Fuenteheridos/Los Marines, que sale desde la misma plaza, lateral del supermercado Komo-Komo, y que aún conserva el nombre de Camino de Los Marines.
El trayecto no ofrece ninguna dificultad (4,5 Km) y transcurre entre castaños, algunos nogales (primer tramo), encinas, alcornoques, quejigos y, desgraciadamente, pinos. En las zonas despobladas de árboles crece el matorral (jara, retama y brezo) y pegadas al camino, las zarzas y las madroñeras. El tiempo de duración, haciéndolo con tranquilidad para disfrutar de sus bellos parajes, (la cámara que no falte) rondará la hora y media.
 
                                                                                                                                                                                                              
 
El sendero está perfectamente señalizado, siempre habrá que ir de frente, y, cuando menos lo esperemos, estaremos en Los Marines, entrando por su barrio alto. Allí podremos echar un buen rato, recorriendo sus calles, la iglesia y, lo que es más importante, degustar el mosto serrano que, artesanalmente, se produce en esta localidad; en cada lugar que lo pruebes, tendrán un color y un sabor distinto; ustedes, más tarde, decidirán cual les pareció mejor. También tienen un matadero de cerdo ibérico, donde podrán adquirir exquisitas chacinas.
El regreso lo haremos por el mismo camino, aunque notaremos que es menos cansado que la ida, lo cual es de agradecer, y terminaremos nuevamente en la plaza de la que partimos, donde sentados al sol, tomaremos algún refrigerio. Cualquier bar de los que hay puede servir; Cercano hay algunos buenos restaurantes, yo recomiendo El Birarritz, últimamente ha subido sus los precios, perosigue mereciendo la pena, se come bien, la atención es buena y sigue siendo asequible.
El resto de la tarde podremos invertirla visitando el resto del pueblo; no se les escape observar la arquitectura de sus viviendas (los estudiosos aducen al origen castellano-leones de los repobladores que trajeron en el del siglo XVIII,) y el remate de las chimeneas, son toda una obra de arte.
Tampoco hay que dejar de visitar Villa Onuba, hermosa finca donde los hermanos Maristas mantienen una residencia dedicada al retiro espiritual, y que en otros tiempos, este que les cuenta, pudo pasar inolvidables estancias. El lugar perteneció a un ingeniero alemán responsable de la línea férrea Huelva-Zafra, el cual fue trayendo plantones de árboles de todos los lugares del mundo que visitó para sembrarlos en aquel sitio, convirtiendo el lugar en un verdadero jardín botánico.
Confío en que haya sido productivo el día y les haya gustado. 
 
 
 
 

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