Sígueme también en este otro blog:

viernes, 31 de mayo de 2013

Antonio Rodríguez Alarcón: "Todos los Winnipeg"













 Todos los Winnipeg


                                                     Yo los puse en mi barco 
                                                                                Pablo Neruda

 

Sobre la piel metálica del carguero,
untada de betún y sal, otra piel
llagada y oscura se tuesta al sol.
No es el crucero que se desliza como iceberg de azúcar,
agujereado de ventanitas, por el Adriático rumbo a Ítaca.
Ni crecen palmeras de plástico junto al vaso límpido
de la piscina en cubierta. Aquí el agua de lluvia
se pudre nauseabunda sin poderse beber.
Son esclavos abandonados en alta mar.
Feroz Siglo XXI, tan esperado y tan cruel,
reviviendo un pasado de negreros y galeras,
de piratas emboscados en los puertos de la abundancia.

¡Son esclavos, oíd, son esclavos!
Otro carguero en septiembre de 1.936, remendó las heridas
de más de dos mil pasajeros, dibujó sonrisas en sus rostros
y cruzó abrazos hacia Valparaíso. Españoles.
Llegaron de Le Perthus, de Argelés sur Mer, de Mont Luis,
de Barcarés…, de desnudas playas cercadas de espino
y metralletas. Sonoros nombres de una lengua tan dulce y cercana.
El hambre, siempre el hambre, pero no siempre.
No siempre el pan, también la libertad sin apellidos,                                                                                      
también la guerra empuja una riada humana, nómada, desvencijada,
hacia todos los puertos de Trompeloup.
¿Se hundió el Titanic con su lujo de cartón piedra
y con él todos los Winnipeg
en el fondo del olvido y la memoria?
Mandad mensajes y cablegramas. Que los lleven las sirenas
adormecidas sobre los mascarones de proa en Isla Negra.
Que despierten todos los cónsules de emigración,
todos los embajadores poetas: que se abran todos los puertos.
Que atraquen seguros todos los Winnipeg.








jueves, 30 de mayo de 2013

Sevilla: Un paseo por el mercadillo del "Jueves"











Se dice de este mercadillo que es el más antiguo, al aire libre, de la ciudad. Situado en plena calle Feria, en el tramo comprendido entre calle Castellar y Correduría -abarcando también las plazas de Montesión y Maldonados (en esta última es donde quizás se puedan localizar los objetos de mayor interés)-, se extiende este viejo mercadillo donde se venden todo tipo de antigüedades, objetos de segunda mano y algún que otro artículo procedente del robo.












Se cree que su origen es anterior a la llegada de los castellanos a Sevilla (1248), siendo su espacio original mayor que el actual, ya que éste partía de la calle Regina y llegaba más allá de Omnium Sanctorum, vendiéndose en él todo tipo de productos. 









Este mercadillo se celebra todos los jueves del año por la mañana, excepto el Jueves Santo, y es recomendable dar un paseo por él, aunque no tengas intención de comprar, ya que te permite descubrir objetos asociados a nuestra infancia, interesantes y económicos libros deshauciados, láminas y postales del año de Maria Castaña, monedas antiguas, bellísimas radios donde oíamos cuando pequeños los primeros seriales, máquinas fotográficas y de escribir que hoy son una reliquia, ropa usada, etc., además de vivir la experiencia de pasear en una bulla.









Cuando estorbabas -se sigue diciendo en la actualidad- te solían decir: "siempre estás en medio, como el Jueves". Uno cogía la indirecta y se apartaba, pero la verdad es que jamás llegué a descifrar la incógnita que encerraba el mensaje, quiero decir que si refería al jueves -día- que está justo en medio de la semana o que, por el contrario, se refería a que todo el mercadillo está desparramado por la calle y supone un verdadero trastorno. Aún hoy sigo teniendo mis dudas, aunque las dos cosas quieren decir lo mismo: que me aparte, que molesto.   
Como fenómeno sociológico, el mercadillo del Jueves (aunque ha decaído bastante y se haya degradado), es una experiencia que nadie debe perderse.  

























miércoles, 29 de mayo de 2013

Ejemplar de Pinsapo en las ruinas del Monasterio de San Pedro de Arlanza











Este quizás sea el ejemplar de Pinsapo (Abies Pinsapo, de la familia Pinaceae) que vive más al norte de la península, en las bellísimas ruinas del monasterio benedictino de San Pedro de Arlanza, en la provincia de Burgos, aunque, después de descubrirlo, no seré yo quien se arriesgue a certificar que sea el único, o que más arriba no aparezca algún otro que desmienta la teoría tan tajante que mantienen los que saben y hablan de ésto, de que esta especie de abeto no prolifera más allá de las sierras de Grazalema, en Cádiz, o de las Nieves, en Málaga.
Está solitario en ese encantador paraje de la sierra de las Mamblas, a 45 kilómetros sureste de Burgos, pero su estado es inmejorable, siendo el amo y señor del caustro del citado monasterio. Calculo que debe de tener más de cien años, con una altura aproximada de 25 o 30 metros. 
Recuerdo, allá por los años ochenta, el gesto de incredulidad de algunos “expertos” en la materia cuando yo aportaba que cualquier especie (incluida la animal) que se la mantuviera en un estado de cuidado mínimo era capaz de prosperar fuera de su entorno, aún en climas y condiciones muy diferentes a las propias. Un ejemplo de ello eran los dos pequeños Pinsapos que yo mantuve en el patio de mi casa durante varios años,  donde en época de canícula llegaban a soportar temperaturas de hasta 45º. Portentosos son, también, los ejemplares que hermosean "Villa Onuba", en Fuenteheridos (Huelva), o los que unos familiares míos poseen en una aldea del Castillo de las Guardas (Sevilla), donde, junto a varios castaños, desafían el sofocante calor de verano que hace durante el día en esos parajes.  





¿Cuál es la explicación? No soy entendido, pero –como el resto de las cosas-, el cuidado, la aclimatación, el milagro de la supervivencia, más el amor y la atención de aquel que lo planta, quizás sean los responsables de que una especie se aclimate en un entorno hostil para el que no fue creado; no encuentro otra respuesta. 








martes, 28 de mayo de 2013

El Microrrelato: ¿Literatura o moda pasajera?







Microrrelato: ¿literatura o divertimento?


Narrativa o entretenimiento; democratización o vulgarización de la literatura. Denostado por pocos y defendido por la mayoría, el microrrelato está de moda y las redes sociales tienen mucha culpa

 
POR CRISTINA MARTÍNEZ 

“Hace días que llueve a cántaros. Y la gata se comió el último grillo que nos mantenía despiertos”. Estas 18 palabras proporcionaron a María Soledad Uranga los 7.000 euros del Premio Internacional de Microrrelatos Museo de la Palabra en 2010. Es decir, 389 euros por cada uno de los términos que la autora utilizó para contar esta pequeña historia. Puede parecer exagerado o una exquisitez narrativa. El caso es que el microrrelato, término que por cierto no está reconocido por la Real Academia de la Lengua, se ha convertido en una opción literaria tanto para escritores como para lectores en una sociedad en la que prima la inmediatez, la escasez de tiempo y, sobre todo, el acceso a las nuevas tecnologías móviles. Y es que leer en un dispositivo electrónico mientras se va en autobús o en un momento de descanso en el trabajo ha propiciado que la brevedad se valore como un preciado bien: una historia que empieza y acaba en, como mucho, dos párrafos de texto. Llega el fin y se pasa a otra cosa, no hay continuidad ni hilo argumental que retomar.

Si el término es nuevo, no se puede decir lo mismo del género. Es cierto. Ya en la Edad Media hay muestras de esta práctica y autores del XIX y XX incluso hacían competiciones para medir su ingenio. Lo que ocurre es que ahora, en este momento, la situación es la más propicia para que haya subido como la espuma. Han salido autores por todas partes y medios; blogs que dan las coordenadas necesarias para que alguien se convierta en un "microrrelatero" de pro y que ofrecen la posibilidad de publicar tus textos; concursos literarios de este género, el de mayor dotación y mencionado antes, con 7.000 euros para el ganador, y también, muchos lectores ávidos de consumir menos pero más a menudo.

"Es una forma de animar a la gente a escribir y de manera muy accesible, algo que es de agradecer en estos tiempos". Lo dice el catedrático de Literatura de la Universidad de Alicante Juan Antonio Ríos Carratalá que ve en la falta de tiempo uno de los secretos de su auge. "Es difícil conseguir que un lector pase mucho tiempo consumiendo una obra literaria, así que si disfruta cinco minutos pues es bueno, lo ideal es que tenga curiosidad por esa literatura, que por otro lado no es nueva. Todo el siglo XX está lleno de ejemplos de autores que lo utilizaban, incluso Jardiel Poncela hablaba de la necesidad de ser breve como obligación".

Los alicantinos Rosa Pastor y Bruno Francés son escritores y, entre otras cosas, escriben microrrelatos. Pastor ganó el II Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra de Quero, dotado con 7.000 euros, con La sopa. "Yo creo que tienen el mismo valor literario aunque no tiene el mismo trabajo ni la misma estructura, pero hay que transmitir en dos frases una historia con un par de personajes, una trama y un desenlace que debe ser sorpresivo, que es lo que a mí me gusta y lo que me estimula como escritora". Considera que esta "moda" se debe por un lado a la dificultad del autor para publicar y por otro a la "facilidad que te proporciona para hacerlo Internet porque la sensación de que te lea alguien es fundamental" y además te ofrece "el espejismo de que eres escritor y, bueno, a mí me parece bien".

Bruno Francés, ganador del Concurso de Microrrelatos de INFORMACIÓN con "Qué mujer", achaca a las nuevas tecnologías su auge. "Lo veo como literatura porque es contar una historia, aunque más cercano a la poética que a la narrativa". En su opinión, "su difusión es más por la red, no lo veo en soporte de papel". En cuanto a su escritura, cree que "hay que saber sintetizar, que suene bien y que sea una historia, y la dificultad es mayor". El problema es que "yo he leído muchos y la gente suele caer en la anécdota en vez de contar una historia, porque se piensa que vale todo. Todo el mundo es bueno para dar sus ideas, pero no todo el mundo es escritor".

Como literatura sin dudar lo define el también catedrático de la UA Miguel Ángel Lozano, "aunque no es nada nuevo". En su opinión, "es un género estimable porque no importa la extensión, importa la solidez del texto, que puede ser de cinco líneas o de quinientas páginas". Además, importa que aquello "irradie sentido, que sorprenda o por el ingenio o por la capacidad lírica. Una frase ingeniosa es buena literatura".

Premio Nacional de Literatura en 2000, entre otros galardones, y poeta, Guillermo Carnero lo tiene claro. "Es el resultado de la falta de tiempo; hoy es muy difícil leerse “En busca del tiempo perdido” de Proust o “La comedia humana de Balzac”. Ahora la gente lee "a salto de mata" y el microrrelato "para un lector es algo inmediato y para un escritor puede ser el germen de un relato largo o de una novela".

"Es el cuento más pequeño que se puede escribir, cuanto más pequeño mejor, y lo que tiene que hacer es impactar al lector". Rafael González, escritor y jurado en el concurso de microrrelatos que organizaba la UA, cree que "tienen que ser una imagen, una impresión y por eso me gustan". "Es un género que tiene que ver con esta sociedad fugaz que apenas nos deja tiempo para detenernos y un microrrelato te sacia, mientras que leer un capítulo de una novela te deja con ganas de más".

Al escritor Mariano Sánchez Soler, que también ha sido jurado del concurso de la Universidad de Alicante, le gusta este género. "Existe en toda la historia de la literatura, pero lo estupendo ahora es que Internet y los medios de comunicación han dado salida a esta vertiente literaria; Hemingway tiene algunos increíbles, incluso había apuestas entre escritores en los años 30 y 40". Afirma que "hay gente que piensa que la novela del futuro se parecerá más a un guión cinematográfico", por eso el microrrelato tiene este auge "porque la literatura se ha hecho imagen y en el microrrelato está la necesidad de transmitir cosas y emociones de forma inmediata".

Para el también escritor José Luis Ferris, "es una manera de hacer lectores; hay mucha gente que ha entrado en la literatura por los microrrelatos que son pequeñas cucharadas de lo que es la literatura, pero cucharadas intensas". En su opinión, responden a la sociedad actual "que tiene como factor esencial la prisa, y estos textos los puedes leer en el autobús".


Microescritores

Una de las puertas que abre el microrrelato es la de la socialización de la tarea del escritor. Todo el mundo se siente como tal porque parece un género fácil de elaborar. Ríos Carratalá afirma que "tengo la sospecha de que hay más escritores que lectores ahora mismo; todo el mundo puede escribir, que tenga más o menos difusión es lo de menos, lo importante al final es que la gente tenga contacto con la literatura y que cree algo, en un microrrelato, en un tuit o en una novela". Sin embargo, "lo que observo es que bajo el epígrafe de microrrelatos hay frases, greguerías, anécdotas y para que sea un microrrelato tienen que tener una historia, con planteamiento, nudo y desenlace".

Para Lozano, "eso ha pasado siempre porque yo me he encontrado gente que se pone a escribir poesía y es un fracaso, aunque él no lo crea, pero no es eso lo que constituye su sentido". El hecho es que "al ser breve puede parecer que la escritura es más fácil y eso puede incitar a que la gente lo haga".

"Esto también pasa con la poesía o el teatro express o los monólogos cortos", afirma González. "Para escribir una novela de 300 páginas no todo el mundo se siente capacitado, pero un microrrelato todo el mundo cree que puede hacerlo, aunque es más una moda".

Sánchez Soler se muestra a favor de que la gente "lea y escriba". Otra cosa es "ir más allá en la literatura, algo que conlleva mucho esfuerzo". "Cuando se democratizan determinadas ocupaciones, se masifica y luego hay que distinguir entre lo bueno y lo malo". "Lo que es cierto es que nunca se ha escrito tanto como ahora, gracias a Internet, los mail, Facebook y Twitter, lo que ocurre es que una cosa es escribir como pasatiempo y otra que te lo plantees como algo complejo porque a escribir se aprende escribiendo y leyendo".

"Gente que sabe que en su vida no va a publicar una novela tiene la oportunidad de ser escritor por un día", afirma Ferris, "aunque no todo el mundo que escribe tiene que ser escritor", pero ahora "hay una democratización absoluta de la expresión literaria, luego serán los lectores los que mostrarán si eres bueno o no".


El tamaño no importa

Uno de los temas de debate en torno al microrrelato se centra en su calidad literaria y la dificultad de su escritura. "La brevedad a veces es más exigente que la extensión", dice el profesor Ríos Carratalá. "En este género, un escritor necesita autoexigirse mucho, es como cuando un director de cine tiene que hacer un anuncio, hay que ser muy preciso".

Miguel Ángel Lozano destaca la utilidad de este género para mejorar el uso del lenguaje. "Tienes que expresar un pensamiento y para ello tienes que buscar las palabras exactas y eso es un trabajo de habilidad, de conjugar unas palabras con unas ideas". Al escritor, "le obliga a pensarlo, a releerlo, a retocarlo... es un ejercicio literario muy meritorio para su desarrollo".

Carnero asegura que "si hay poemas en prosa ¿por qué no va a haber microrrelatos? En la medida en que la brevedad signifique intensidad me parece que está bien porque eso aproxima este género al poema en prosa". Considera que "puede ser una convergencia de la poesía hacia la prosa, es una cuestión de extensión y el concepto de literatura no está relacionado con la extensión porque puede haber literatura en una línea y no haberla en 20 volúmenes".

Para Rafael González este género no es fácil, "porque quintaesenciar algo y causar una emoción es lo más difícil que se puede hacer, por eso no hay tan buenos poetas como poetas dicen que son, ni tampoco tan buenos autores de microrrelatos como ellos creen". Y es que "para el autor es un ejercicio de estilos y de síntesis literaria, cuando está bien hecho claro, porque incluso Monterroso tiene algunos buenos y otros no. Casi me parece más complicada y laboriosa la síntesis que la extensión".

Sánchez Soler cree que "es muy difícil porque tienes que coger la esencia literaria" y destaca que "una cosa es escribir y otra hacer literatura, que es la propia opción del autor de leer y escribir mucho, de complicarse la vida, de investigar y de querer transmitir algo", porque un microrrelato "no es una cosa cortita con pocas palabras, tiene que contar una historia y tener ese aspecto de incluir lo que se dice pero sin decirlo".

"Es un macroesfuerzo para hacer una microhistoria porque es muy difícil condensarla en tan poco espacio, incluso hay grandes escritores que no saben hacerlo", afirma José Luis Ferris. En su opinión, "la lengua se ha degradado mucho, pero es verdad que en el momento en que cuelgas algo en la red te van a bombardear si tienes fallos y eso hace que la gente esté aprendiendo mucho a nivel lingüístico".


La red como editorial

La proliferación de blogs y la ventana "editorial" de Internet ha facilitado sin duda la difusión y proliferación de autores y de lectores. En este sentido, Ríos Carratalá considera que es un género ligado a las redes sociales. "Es muy fácil difundir los textos y publicarlos, pero no hay que ser apocalíptico en este sentido sino admitirlo como algo del presente porque se puede hacer una novela de 500 páginas y al mismo tiempo escribir microrrelatos; también el lector tiene ahora esa opción de elegir qué quiere o qué puede leer, el problema sería si la gente dejará de leer normales en el estilo clásico por leer microrrelatos, pero creo que eso no sucederá".

Lozano coincide en la facilidad de publicar en la red. "Ahora es muy fácil tener la difusión de un microrrelato y la eficacia está en que lo lees en un golpe de vista, lo abarcas enseguida y como acto de espontaneidad psicológica pues hace que se lea".

Las redes sociales, para Rafael González, "democratizan mucho pero el talento por desgracia lo tienen unos pocos y nada más, y con el tiempo quedarán los microrrelatos, novelas o poemas que sean buenos, las que no lo son, pasarán al olvido".

Sobre este tema, el escritor Mariano Sánchez Soler afirma que es la revolución tecnológica "la que ha propiciado esto" porque influye en su proliferación la facilidad con que se puede "publicar" en la red. "Ahora la literatura se ha hecho movimiento, rapidez y eso tiene mucho que ver con la juventud y su forma de entenderla".


(Artículo publicado en el diario Información.es de Alicante, el 26 de enero 2012)







lunes, 27 de mayo de 2013

Destituyen a José Chamizo, Defensor del Pueblo Andaluz













Los grupos políticos del Parlamento de Andalucía han logrado, por primera vez, ponerse de acuerdo para ejecutar una medida. No crean que se trata de algo relacionado con el paro (un millón y medio de andaluces); ni con los recortes; ni la sanidad; ni la enseñanza.  Nada de eso. Estos temas les importa un pimiento a nuestros sufridos padres de la patria. Se han puesto de acuerdo los tres (sí, los untados de IU también han colaborado) en cepillarse a José Chamizo, después de diecisiete años ejerciendo como Defensor del Pueblo Andaluz. Y cuando digo ejercer quiero decir comprometido con el menester para el que fue designado, trabajando incansablemente por los ciudadanos y la defensa a ultranza de los más desfavorecidos, siempre desde una actitud libre, sin prestar pleitesía ni obediencia a ninguno de los partidos que conforman el Parlamento.

Cualquier persona que tuviera un problema, fuese autóctono o inmigrante, tenía abierta las puertas de su oficina. Se posicionó a favor del 15-M; también por los ocupantes de las Corralas y en contra de los desahucios, etc., con lo que comenzó a ser molesto para los tres partidos que habitan en Las Cinco Llagas. Para complicar las cosas, el pasado mes de Junio se atrevió a reprender a los políticos por su inactividad e ineficacia, y desde ese mismo día firmó su acta de defunción.

A unos políticos fosilizados, soberbios, y envidiosos del aura popular que envuelve a Pepe, nada les ha importado la eficaz labor mediadora que éste haya podido realizar durante todo el tiempo que ha ejercido como Defensor del Pueblo, y aprovechando el rapapolvo que Chamizo les metió, estos han decidido fulminarlo rápidamente.  Entonces comenzaron los intercambios de cromos entre los dos partidos hermanos,  –al que se  sumaría inexplicablemente IU-, y en un abrir y cerrar de ojos los tres se pusieron de acuerdo para destituirlo, con lo poco que se entienden para unir fuerzas en otros problemas más graves.

La actitud de PSOE y PP no debe de sorprendernos. Ellos prefieren tener “colocados” en determinados puestos relevantes, a individuos paniaguados que se dejen manipular o que trabajen a los dictados del amo que les paga. Pero lo de IU, la verdad, es algo que me llena de asombro. ¿Es que no sienten una chispa de sonrojo por la actitud entreguista que mantienen hacia el PSOE?  ¿Tan sabroso es el trozo de tarta que les dan como para atreverse a engañar a miles de votantes que lo hicieron, no para que se metieran en la misma cama con los socialdemócratas, sino para presentarle batalla? ¿Esta es la "otra manera de gobernar" que nos publicitaban en la pasada campaña electoral ? ¿O tal vez ocurra que no llevan bien que el Cura Comprometido sea más izquierdista y rojo que ellos? 


Hay que felicitarlos. Por primera vez todos los grupos de la Cámara Andaluza se han puesto de acuerdo... Pero ha sido para destituir al mejor Defensor del Pueblo que ha tenido España.




(Intervención en el Parlamento Andaluz, donde Chamizo abronca a los políticos de la cámara por su ineficacia, y que, por lo visto, fue la gota que colmó el vaso de la paciencia de nuestros sufridos parlamentarios).
  

domingo, 26 de mayo de 2013

Loreena McKennitt: "The Lady Of Shalott "











Qué mejor que terminar la semana oyendo a este ángel  celestial que ha osado quedarse entre nosotros, los insufribles terrícolas
Loreena Mckennitt es quizas una de las mejores voces que se han oído -y quedan- de aquel movimiento efímero que se llamó música New Age. Cuando un cantante es bueno y auténtico, por norma general, suele gustar más en directo que en el disco. Como un vis a vis, el artista se entrega al auditorio, como si de un amante se tratara, y  logran transmitir, de esa manera, más claramente y acertado su mensaje.
Siempre que he podido he acudido a sus conciertos, a pesar de celebrarse lejos de mi ciudad, y, la verdad, jamás me ha decepcionado.
Me es grato sacar del recuerdo a esta extraordinaria cantante y compositora que llenó -y sigue haciéndolo- grandes momentos de mi vida.




sábado, 25 de mayo de 2013

Rafael Lozano: "Dos momentos en la vida"








Dos momentos en la vida 



Hay dos momentos en la vida
en los que podría jurar que soy feliz:
Uno,
cuando estoy contigo;
el otro,
cuando tú estás junto a mí.









viernes, 24 de mayo de 2013

Rafael Lozano: "Palabras como pájaros"













Las palabras son como pájaros: en cuanto abres las ventanas salen volando. El problema surge después, cuando las necesitas, pues sin ellas, uno es incapaz de articular nada que sea entendible para los demás, y, a veces, corremos el riesgo de ahogarnos. Cuando las palabras faltan, sentimos un gran vacío en nuestro entorno, y, aunque para estar en silencio, para los grandes solitarios, en ocasiones resultan harto incómodas por su negativa a quedarse quietas, las palabras, las malditas y adorables palabras, son insustituibles por nada.
A cierta edad es tanta la acumulación de ausencias que una más, se hace insoportable. Cuando ves que te faltan, que te esquivan, que juguetonas, trastabillan por el corredor o bajan las escaleras a la pata coja, uno no puede evitar sentirse aprensivo ante su distanciamiento. Luego, por las noches, cuando crees firmemente que las sorprenderás dormida junto a la biblioteca, descubres con error que no han venido a dormir y, muerto de celos, la imaginas coquetas en los labios de otro o al borde de la estilográfica de un joven gramático.
Entonces, te derrumbas, estrujas tu espalda contra el viejo respaldo de la butaca, buscando en un vaso de güisqui el consuelo que necesita el alma. Te cuesta aceptar que todo haya acabado, que a partir de hoy el silencio sustituya el retumbar de sus carambolas acrobáticas, y vuelves a rebuscar en los armarios, en las estanterías, pero lo que ves te aterra mucho más que la marcha del día: los libros, los folios antes emborronados, los tarros de cristal, las cajitas de galletas, todo, todo está vacío, ni un garabato siquiera como despedida.
Y el pobre derrotado, el hombre maduro al que todos y todo abandonan, abre la puerta de la casa, respira el frío helado de enero que pasa por delante de su casa y, en un gesto desesperado, mira al cielo raso lleno de estrellas, anhelando que llegue pronto su serpiente y lo lleve a los confines de los planetas, allí -le han dicho- el mundo está lleno de palabras fieles y armoniosas, llenas de luz y coloridos, dispuestas a todas horas -no importa la estación ni el estado de ánimo- a prestarse para lo que uno disponga.
La palabra es un sortilegio, un continuado deseo, un tesoro esquivo, un ardiente amor, un insufrido anhelo, que una vez que ha conseguido penetrar en tu cuerpo, te domina, te amolda, te perfila, haciéndote su más servil esclavo.
Ya no puedes vivir sin palabras, el mundo, sin ellas, resulta confundido y silencioso; sin ellas, ni vivimos ni existimos: ¡estamos tan hechos a ellas!         






jueves, 23 de mayo de 2013

Rafael Lozano: "Haciéndo méritos"









Para cuando muera, elegiré el infierno como última morada, estoy convencido de que será el lugar del hiperespacio donde menos incómodo me encuentre. Creo que será un sitio atractivo y divertido para pasar el resto de los años: confortable, bien acondicionado, con todos los adelantos terrenales de los que hacen soportable este vivo mundo, ya que al haber tanta gente destinada a esa penitenciaría, cualquier inversión ejecutada en ella se rentabiliza con facilidad.

El caso es que me motiva la elección del averno como final a mi trayectoria terrícola. Desde que conocí quiénes eran los recomendados para la gloria decidí de inmediato una huída hacia atrás en mi camino de persona buena y sensata, y me entregué con desenfreno al culto de la maldad, ayudando a cruzar las calles a invidentes que, más tarde, abandono en medio de la calle; robo las pensiones de primero de mes, a todas las ajadas viudas que van a cobrarlas a las Cajas de Ahorros; doy caramelos, refregados en achicharrantes guindillas, a todos los niños imbéciles que obedecen las advertencias de sus padres, etc.
Lo cierto y definitivo es que, sabiendo quienes suben al paraíso, prefiero arriesgarme a bajar a los infiernos. En el Cielo –me han dicho, de buena tinta-  la temperatura es bastante similar a la de mi ciudad: inviernos húmedos y fríos y veranos tórridos y secos. El personal que lo frecuenta es de lo más soso: mujeres viejas y enlutadas, siempre con una Biblia y el rosario en la mano, murmurando letanías en agradecimiento por el bien concedido; franquistas recomendados por el cura de su parroquia; explotadores arrepentidos diez minutos después de muertos; banqueros engominados que tuvieron la precaución de hacerse un seguro multicielo, etc. No hay música (me refiero a rock, blues, jazz, folk, etc.), tampoco tienen calefacción ni aire acondicionado, porque, argumentan los mandamases, “que para los pocos que son, no merece la pena gastarse los pocos eurocielos que poseen”.
En el Infierno, todo son ventajas. Como está a rebosar, calorcito en invierno, refrigeración en verano, altavoces musicales por todos los túneles, cerveza a raudales, malas mujeres por doquier (amantísimas madres que dedicaron su vida a la cría de sus retoños y no sacaron un rato para ir a la iglesia), aborrecibles hombres (a todas horas trabajando, intentando llevar a casa la mayor cantidad de dineros, cuando no, metido en huelgas y pegando pasquines, o al frente de una irreverente manifestación), gente que no sabe decir siquiera “un padre nuestro”, y que no tuvieron tiempo, al morirse, de arrepentirse, tratando de ajustar –egoístamente- el futuro de sus seres queridos.

En este lugar –cuentan los que han estado allí- todo es juerga, diversión y alguna que otra vez movida. Porque aquello, dicen, está todo lleno de comunistas, anarquistas, ateos, agnósticos, libre pensadores, que se niegan a seguir los ritmos de trabajos que imponen los adjuntos del diablo, por ello, semana sí -y la siguiente también-, es un continuo circular de huelgas de brazos caídos que amenaza con convertir la caldera infernal, en un simple hornillo para tener a punto el ponche.

Por tal motivo, estoy haciendo méritos para ganarme un  puesto en esa residencia infinita. Desde que actúo de la nueva manera, el mundo me sonríe diferente. La depresión ha desaparecido de mi mente, soy más optimista y sonriente, la primitiva me suele tocar de vez en cuando, y es que la vida que llevaba antes, no merecía la pena. Me entristecía viendo a un negro en un semáforo; me rompía el alma el naufragio de una patera y las consecuentes muertes de subsaharianos; cualquier atentado terrorista me llenaba de congoja, cuando no, las incomprensibles guerras entre hermanos que provocaban los países democráticos.
Aquello no era vida, os lo garantizo, y cuando me enteré de la recompensa que se obtenía, lo tuve perfectamente claro: Yo, desde ahora mismito, hago votos para ganarme el infierno. Confío en que me lo adjudiquen y no me jodan mandándome al cielo.    







miércoles, 22 de mayo de 2013

Manifiesto en contra del euro








Empieza a cristalizar una oposición a que España continúe formando parte del euro y por el momento han lanzado un Manifiesto suscrito en un principio por más de 1.000 profesionales, en el que se exige la salida de la moneda única. Entre los firmantes de este Manifiesto se encuentran Julio Anguita y Manuel Moreneo, políticos; Juan Francisco Martín Seco, Pedro Montes, Manuel Muela y Antonio Gallafa, economistas; Agustín Moreno, exsindicalista, entre otros. 
Ya era hora que surgiera un bloque que recogiese el malestar y el rechazo que el euro y, por añadidura, esta ficticia Unión Europea, provoca en un mayoría de ciudadanos, que sólo está beneficiando a unos pocos y en la que estamos sometidos a los mandatos que desde Alemania nos dictan. 
Si estás en contra del euro. Si estás en contra de esta Unión Europea mercantilista, lee y, si lo crees conveniente, firma el Manifiesto.


Por la recuperación de la soberanía económica, monetaria y ciudadana.




La dramática situación social y económica en la que está hundida nuestra sociedad exige una política capaz de crear las condiciones para salir de la crisis. Es una necesidad urgente. El tiempo se ha convertido en un dato primordial por los riesgos de agravamiento y degradación que existen, por el enorme sufrimiento social que provoca la persistencia de las políticas de ajuste, austeridad y privatización de lo público.
La red en la que estamos atrapados  está conformada por un nivel de paro catastrófico, por un endeudamiento del país frente al exterior imposible de afrontar y por una evolución de las cuentas públicas que conducen a la quiebra económica del Estado. Más de 6 millones de parados, más de 2,3 billones de euros de pasivos brutos frente al exterior, y una deuda pública de casi un billón de euros, creciente y próxima al 100% del PIB,  son datos que definen un desastre inmanejable, ponen en peligro la convivencia y derruyen derechos sociales fundamentales.
Una crisis de esta envergadura tiene causas complejas y múltiples, desde la crisis  general del capitalismo financiero hasta el despilfarro y la corrupción propios, pasando por un sistema fiscal tan regresivo como injustamente aplicado, pero aun a  riesgo de simplificar el análisis para desentrañar  las soluciones, hay que atribuir a la incorporación de nuestro país a la moneda única la principal razón de esta desoladora situación.
Como ahora se reconoce, no había condiciones  para implantar una moneda única  entre países tan desiguales económicamente sin ir acompañada de una fiscalidad común. Su creación implicaba, por otra parte,  un marco propicio para implantar políticas regresivas y antisociales de todo tipo según la doctrina neoliberal, que ha tenido en  la construcción de la Europa de Maastricht su máxima expresión.  Como se calibró en su momento, el Estado del bienestar no es compatible con la Europa de  Maastricht.






 

Rafael Lozano: Aforismos (2)













¡Nunca estuvo el mono tan enamorado de sí mismo!



-o-o-o-o-o-



El egoísmo está relacionado con la ausencia de amor.

Quien ama, se entrega y da, sin esperar recibir nada a cambio.


-o-o-o-o-o-


La generosidad es un acto reflejo de la racionalidad, mientras que la del ego, está íntimamente ligado a nuestro pasado animal.



-o-o-o-o-o-


Para salvarnos, cuando mantenemos nuestras batallas internas, siempre echamos mano de un culpable externo.


-o-o-o-o-o-


El hombre que ves,

no es el hombre que soy,

es el hombre que tu quieres ver.


-o-o-o-o-o-


El hombre que ves,

no es el hombre que soy,

es el hombre que quisiera ser.


-o-o-o-o-o-


Hay quien teme la soledad física, en cambio, a mí, lo que me aterra, es la soledad compartida.


-o-o-o-o-o-


Si el mal es la ausencia del bien,

y la fealdad la carencia de belleza,

¿qué es la vida y la muerte?

Conozco a vivos que deambulan como muertos,
y, a su vez, muertos que se pasean vivos por nuestros recuerdos.


-o-o-o-o-o-


Entre llegar y venir está el tramo más insalvable: morir.


-o-o-o-o-o-

No tiene sentido seguir buscando.
Si existes, al final terminaré encontrándote.

Aunque me quede sentado, acabarás en mis brazos.


-o-o-o-o-o-


Nadie debería morir.
La muerte es el mayor atentado criminal que se comete contra la vida.

-o-o-o-o-o-

El hombre debería ser eterno,
sólo así reventaría en su osadía.

-o-o-o-o-o-

...Y el hombre creo a Dios, y lo hizo a su imagen y semejanza.







martes, 21 de mayo de 2013

Rafael Lozano: "Espejismo" (Microrrelato)








Espejismo



Vivíamos un espejismo. Cuando despertamos, allí estaban los dioses, sonrientes, observando desde las altas torres de su reino, cómo, después del sueño, los pobres ilusos seguían atascados en el cieno de su quimera










lunes, 20 de mayo de 2013

Rafael Lozano: Selección de Haikus












Puedo confesar,
que nada hay tan grave
que vivir sin ti.

******

Seamos coherentes:
lo que ayer ocurrió
fue un espejismo.

******

Intentando querer
olvidamos los días
de desamor.

******

Bella pintura
tu rostro reflejado
en la ventana.

******

Después de todo,
para nada sirvió
que lo intentáramos.

******

Somos culpables
de todo lo que hicimos...
y del silencio.

******

Amor, cariño,
díme qué puedo hacer
sin tus abrazos.

******

Los sueños son
las sombras delatoras
de nuestros deseos.

******

Y si me miras,
no hay eclipse de sol
que me desarme.

******

Tienen tus besos
el bálsamo mágico
que me relajan.

******

El ayer y el hoy
son parientes lejanos
de la mañana.

******

El sol se oculta
cada vez que te asomas;
¿será por miedo?

******

La revolución
es una necesidad
que no se nota.

******

Desde la altura,
los dioses envilecen
nuestros tormentos.

******

Hágase en mí
tu mórbido deseo:
ser beso tuyo.

******

La primavera
¿llega para quedarse
o es pasajera?














Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...