Si hay un músico -y una voz- que destaca por su calidad inigualable, este es Imanol, compositor vasco poco conocido en el resto del estado que ha elevado la canción de autor a unos límites insospechados.
La trayectoria profesional y política de Imanol ha estado siempre marcada por un fuerte compromiso con la democracia y la liberación del Pueblo Vasco -dentro de una perspectiva internacionalista-, pero después de lograr escaparse de las garras del pequeño dictador, tuvo que enfrentarse a las amenzas de muerte de aquellos "patriotas" radicales que no le perdonaron que cantara y grabara en español y musicara la poesía de Neruda, Alfonsina Storni, o Lope de Vega, amenaza que gracias a la solidaridad recibida de todos los demócratas verdaderos, no llegó a consumarse.
Para hoy he elegido dos temas. El primero, "Ausencia", de Lope de Vega, un tema que llegó a convertirse casi en un nuevo himno vasco; en segundo lugar -y con profundo cariño- "Mendian gora haritza", porque creo que la poesía y la música vasca -desgraciadamente- es poco conocida en el resto del estado, y desmonta el falso mito que los enemigos de Euskadi han forjado, porque debajo del chaleco de un vasco hay una bomba -no de relojería-, sino de esas de músculo y carne, ventrículos y arterias, que logran armonizar unos sentimientos y unos versos como los que Imanol y otros muchos poetas y músicos expresan. Ya va siendo hora de que las conozcamos.
Ausencia
Ir y quedarse, y con quedar partirse,
partir sin alma, y ir con alma ajena,
oír la dulce voz de una sirena
y no poder del árbol desasirse;
partir sin alma, y ir con alma ajena,
oír la dulce voz de una sirena
y no poder del árbol desasirse;
arder como la vela y consumirse
haciendo torres sobre tierna arena;
caer de un cielo, y ser demonio en pena,
y de serlo jamás arrepentirse;
haciendo torres sobre tierna arena;
caer de un cielo, y ser demonio en pena,
y de serlo jamás arrepentirse;
hablar entre las mudas soledades,
pedir prestada, sobre fe, paciencia,
y lo que es temporal llamar eterno;
pedir prestada, sobre fe, paciencia,
y lo que es temporal llamar eterno;
creer sospechas y negar verdades,
es lo que llaman en el mundo ausencia,
fuego en el alma y en la vida infierno.
es lo que llaman en el mundo ausencia,
fuego en el alma y en la vida infierno.
Lope de Vega
Mendian gora haritza
Monte arriba está el roble
las cabras andan por las peñas
el alma del mar trae
espuma sobre las olas.
Quiero cantar la vida
si no se me descomponen las palabras
pondría a danzar el mundo
como si fuera dios.
La tristeza de Euskal Herria
la costura de los vestidos negros
se ha llenado de pájaros llorosos y
se ha quedado sin humor.
Dadme frescor
agua de mano en mano
bebiendo la sopa azul de las estrellas
vivo a gusto.
El poeta de Euskal Herria
la trompeta del cementerio
tocando a muerto y
golpeando el vacío.
Alegra tu cara
guardando las penas para ti
que cada mañana la vida también
está surgiendo ahí mismo.
El mundo no siempre es alegría
también está triste a veces
pero existen mil motivos
para cantar alegres.
De todas formas no quiero
aumentar las penas que vienen
la noche que yo muera
al menos dormid tranquilos.
Xabier Amuriza
No hay comentarios:
Publicar un comentario