Aquí están de reclamo comercial, en la pared exterior de una tienda de artesanía, pero siguen siendo utilizados en la sierra de Aracena para recoger castañas y setas.
Son canastos hechos de mimbre, una fibra vegetal que se obtiene de un arbusto de la familia de los sauces (Salix), y con la que han trabajado los artesanos de Andalucía desde hace siglos.
¡Ya lo creo! No sólo en los pueblos, también en las ciudades. En el colegio de Las Carmelitas, nuestra tata nos llevaba el almuerzo en uno de esos canastos. Que estuvo rodando por ahí hasta hace relativamente poco en que uno de mis niños le dió el toque de "gracia" sentándose encima, compostura imposible. claro. Pero estas cosas tenían multiusos, a mi me gustaban, ahora los tengo pero en miniaturas, de adorno...
ResponderEliminarPues ya ves, después que nos deshicimos de ellos, ahora vuelven a ser útiles. La moda tiene un fuerte componente cíclico y circular.
ResponderEliminarSaludos.