En tres días, más de 15.000 parados acuden a una oferta de 150 puestos de trabajo. ¿Dónde están los que no quieren trabajar, señores mentirosos?
La noticia -y la foto- tira por tierra las reiteradas mentiras que sobre los desempleados realizan –día sí y el siguiente también- políticos, empresarios y
periodistas. Los parados quieren trabajar, lo que ocurre es que no se ofertan
trabajos, y los pocos que ofrecen, no sólo es que se gane poco, sino que además
son esclavistas y en el cambio -entre lo que pagan y el gasto que implica trasladarse a él- se le
pierde el dinero.
Pero aún así, y a pesar de las condiciones decimonónicas en
las que de golpe nos han metido, la población trabajadora acude –sin tener
adecuada información de la oferta laboral- allá donde se vislumbra la
posibilidad de un trabajo.
A los hechos me remito. Desde el pasado jueves, viernes y lunes, más de quince mil personas acudieron a la llamada que hacía una ETT de Getafe, ofertando ciento cincuenta
empleos, solicitudes que se unirán a los ocho mil currículum que la propia empresa ya posee, con lo que más de veintitrés mil aspirantes optarán a esos ciento cincuenta deseados puestos.
Esta es la realidad de nuestro país, señores Pinocho, y no la que
vosotros, sibilínamente, deslizáis todos los días. Se coge antes a un mentiroso
que a un cojo, y vosotros destacáis por las dos cosas: sois embusteros,
atrofiados y, además, malvados. ¡Y eso que presumís de “piadosos cristianos”! ¡Qué manera de
vulnerar vuestro sagrado octavo mandamiento!
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