Segunda etapa: Los Palacios-Dos Hermanas
La etapa de ayer (Los Palacios-Dos Hermanas) se puso en
marcha sobre las 10 de la mañana, escoltada –como ya viene siendo habitual- por
un desproporcionado contingente policial que debe de estar costando una buena
pasta, pero esto le da igual al gobierno, tiene que hacer el paripé de que
protege a la ciudadanía de esta “horda de bárbaros que va arrasando allá por
donde pisa”. ¡Quiere tener tranquilo a los que tienen malos remordimientos!,
esa es la cuestión.
Cuando a la marcha aún le faltaba 4 kilómetros para llegar a
Dos Hermanas, un grupo de sindicalistas ocupó un supermercado de la cadena Lidl
(para mostrar el rechazo a la visita de la jefa de Europa, la Frau Merkel que
nos trae nuevos recortes), sin que la policía se enterase de nada (¡no sé para
qué tanta vigilancia!), hasta que una hora después de la ocupación se comunicó
al resto de manifestantes. Ese fue el momento en que la policía y los
periodistas se dirigieron al lugar, procediendo al desalojo y detención de los
ocho sindicalistas que ocuparon el citado supermercado.
La Subdelegación del Gobierno había prohibido que la marcha atravesara las principales calles de Dos Hermanas, intentando de esta manera hacerla “invisible”, pero de nada les ha servido, ya que el pueblo ha salido masivamente a las calles a recibir a los jornaleros, convirtiendo la misma en una espectacular manifestación de solidaridad. El tiro les ha salido por la culata, cada día es mayor el número de ciudadanos que se adhiere a esta Marcha Obrera de los jornaleros del SAT.
La Subdelegación del Gobierno había prohibido que la marcha atravesara las principales calles de Dos Hermanas, intentando de esta manera hacerla “invisible”, pero de nada les ha servido, ya que el pueblo ha salido masivamente a las calles a recibir a los jornaleros, convirtiendo la misma en una espectacular manifestación de solidaridad. El tiro les ha salido por la culata, cada día es mayor el número de ciudadanos que se adhiere a esta Marcha Obrera de los jornaleros del SAT.
Hoy es la tercera y última. Confíemos en que sea un gran día: Sevilla está ya a
la vista y gente que los reciba no les va a faltar.
Saldrán del polideportivo Ramón y Cajal a las nueve de la mañana y, hacia el mediodía, harán una parada de descanso en Bellavista, desde la que más
tarde partirán con el objetivo de llegar sobre las 7 de la tarde al Campo del
Betis y de aquí a la Subdelegación del Gobierno en la Plaza de España, no si
antes hacer un acto simbólico de protesta, frente al Hospital Virgen del Rocío,
por los recortes a los que se está sometiendo a la Sanidad Pública.
El llamamiento está hecho. Sólo falta que nosotros vayamos. Sevilla
tiene 250.000 parados: espero que demuestren que lo están de verdad y no falten a la cita.
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