Es
una obra maestra. Más que un spot publicitario para una campaña electoral,
parece la culminación cinematográfica del mejor realizador de cine.
Si
Izquierda Unida en Andalucía pretendía calar “jondo”, hay que reconocer que con
la elaboración de este vídeo ha dado en el clavo: deben de ser pocos los que
ante su visión no se les pongan los vellos de punta y, sin que nadie los
observe, ofrezca una escurridiza lágrima al estanque de las hermosas pasiones.
Si el propósito de sus realizadores era impactar, tocar las fibras sensibles de quienes lo vean y escuchen,
llegar al lado oscuro y más profundo del ser humano, pueden darse por
satisfecho, este trabajo -hay que reconocerlo rotundamente-, ha conseguido ese
objetivo. Enhorabuena a todos los que han hecho posible esta admirable creación
publicitaria. Mi felicitación a Izquierda Unida y, sobre todo, al artífice de tan logrado
trabajo. Parece ser que con Antonio Maillo vuelve el buen hacer y la cordura a la atribulada coalición, confiemos en que también sepa gestionar el difícil voto que reciba en esta cita electoral de marzo y no la tire al cubo de la basura, como hizo su antecesor Diego Valdera pactando con el PSOE.
¡Construir la luz!... Pues hagámosla de una puñetera vez, para que la oscuridad desaparezca para siempre de esta sufrida tierra.
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