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De lo que no me cabe duda es que hay vida codiciosa e inmoral, hasta inhumana, basta con fijarse en la valiente y clara denuncia de la foto.
ResponderEliminarGracias, Manuel. Con tu permiso, la divulgaré por mi blog, callarse es lo menos eficaz, sobre todo, no sería solidario y ético. Nuestros semejantes en la desgracia merecen el apoyo y consuelo que les ocasionan los de siempre. Creo en el ser humano bien nacido, pero no en la justicia humana. No me callo, ea.
Afectuosamente.
Mari Carmen.
Me parece perfecto, Mari Carmen, aunque a estas alturas de la batalla, no creo yo que logremos cambiar a la humanidad con una simple fotografía... Ante ella, sólo reaccionan personas sensibles como tú a las que no les hacen falta ver estas imagenes para saber que no lo estamos haciendo bien y que hay semejantes nuestros que la están pasando canutas.
EliminarUn saludo.
Discrepo cordialmente, son las almas sensibles las que se movilizan y presionan socialmente a los gobiernos para conseguir los objetivos. Los que no se conmueven y les dejan indiferentes esta foto, lo siento por ellos, tienen el peor de los males del corazón.
Eliminar¡ "Anda, Manué la que as líao con tu peaso de estrá!
No sabes lo contenta que estoy de haber descubierto tu blog, es estupendo ...
De vez en cuando, date una vueltecita por esta entrada en mi blog, se va divulgando...
Afectuosamente.
Pues yo, Mari Carmen, no discrepo, ratifico por completo tus palabras, lo que ocurre es que esas almas sensibles no la monta el ingeniero con mucha frecuencia en nuestros cuerpos.
EliminarYa te visito a menudo, lo que ocurre es que no dejo rastros.
Nos vemos.
! Estoy más contenta que ayer, Manuel!, Mira, mi amiga; Rosa, plena de solidaridad, subió tu entrada a su blog, me parece una estupenda idea, pasito a pasito se puede llegar muy lejos, lo que pasa es que esta pobre gente necesita URGENCIAS...
EliminarGracias mil veces...
Me conmueve tu caluroso ánimo, Mari Carmen, por eso siento decirte que esto no sirve para nada; yo soy más pesimista que tú (quizás sean los años) y he de reconocer que esto seguirá igual: el primer mundo reventará saciado y gordo y la otra parte, los parias, sedientos y famélicos. ¿Has pensado alguna vez cuántas pozos, escuelas, hospitales y comidas se podrían hacer con un sólo cohete que se manda al espacio? ¿Y quiénes son los responsables de este desatino? ¡Nosotros! que legalizamos en las urnas a estos desarmados gobiernos. No creo en la benignidad del ser humano, así como tampoco creo en su redención. Y corto el rollo.
EliminarUn abrazo.